Un río o flujo de agua es una corriente natural de agua que fluye con continuidad por un cauce en la superficie terrestre. Posee un caudal determinado, rara vez es constante a lo largo del año, y desemboca en el mar, en un lago o en otro río, en cuyo caso se denomina afluente. La parte final de un río es su desembocadura. Algunas veces terminan en zonas desérticas donde sus aguas se pierden por infiltración y evaporación (ver río alóctono).
Los ríos forman parte del ciclo hidrológico. El agua generalmente se acumula en un río de la precipitación a través de una cuenca hidrográfica de la escorrentía superficial y otras fuentes como la recarga de agua subterránea, manantiales y la liberación de agua almacenada en hielo natural y capas de nieve
Algunos peces de agua dulce son:
Anguila: nacen en el mar de los Sargazos. Las larvas emigran hacia los ríos europeos y norteafricanos, a donde llegan a los tres años de edad (angulas). En los ríos pasarán entre 4 y 10 años, momento en el que comienzan su migración reproductora hacia el lugar en el que nacieron. Los adultos mueren después de reproducirse;
Bagre, en América Central y del Sur;
Brema: vive en aguas de corriente suaves;
Caribe o piraña, en los ríos de América del Sur;
Cachama, en América del Sur;
Carpa;
Escardinio: vive en aguas tranquilas y muy llenas de vegetación;
Esturión, pez euroasiático de gran tamaño, con cuyas huevas se elabora el caviar;
Gobio;
Ródeo;
Rutilo: se adapta a las aguas fangosas aunque prefiere las claras;
Salmón: nace en ríos de montaña con aguas de corriente rápida y fondos pedregosos. A los tres años emigra hacia el mar y regresa al río para reproducirse;
Temblador, gimnoto o anguila eléctrica (América del Sur);
Trucha de río: vive en aguas claras y frías, ricas en oxígeno;
Barbo.